jueves, 30 de julio de 2009

Conspiración















Hay personas y momentos que se entierran tan profundo en uno que ni siquiera uno mismo tiene acceso hasta ese lugar para limpiar o hacer exorcismos, desterrar o hacer funerales. Y esos vestigios inamovibles, invisibles, incomodos, hacen nido y toman vida propia, se organizan en sindicatos y claman el derecho de existir sólo porque no puedes tocarlos. En silencio toman poder y fuerza y el día menos pensado intervienen tus sueños, te sancan lágrimas en las mañanas al despertar, desactivan tu hablidad de ver colores, sonreir; lo peor es cuando se apoderan de tu apetito, tu gusto por la figura humana y por vivir. Sin embargo uno puede combatirlos y buscar vivir a plenitud en contra de la conspiracion, hacerle un elogio a la belleza y buceace algo bueno que pase por el frente, comer helado y pizza aunque no te provoque, sonreir sin un chiste, sonreirte al espejo, sonreirle al extraño. Disfrutar de una vida blanco y negro imaginando que Chaplin viaja contigo al lado en el bus y no abrir los ojos en las mañanas hasta que las lágrimas se conviertan en lagañas; y aprender a soñar despierto para que tu sueño intervenido pierda forma y sea un hecho extraño de un universo concurrido.

Nota: comentario a Andrea en Noches sin lunas

miércoles, 29 de julio de 2009

Mantenimiento














Un par de lágrimas de vez en cuando para lubricar y pulir la coraza no le caen mal a nadie...

Está reseca tu coraza?
A la mía se le cayeron un par de escamas...

lunes, 13 de julio de 2009

Es primavera
















Recuerdo solía madrugarte un mensaje,
pintarte el boceto de la sonrisa primera,
y despertarte.

Atrás el trasnocho de la barra,
dos horas de sueño han de ser suficiente;
dos más en los pasillos,
llevar mi moral suave y mullido.

En la parada los buses despeinan mis lagañas,
mientras apenas el sol
acaricia los picos del Ávila;
te espero.

Tu mano vacila en la ventana,
hoy es verde y blanco
y ponen Ballenato en las mañanas.

Subir de un brinco audaz casi dormido,
maquillar de alegría mis ojeras,
y sonreir,
que andar contigo en bus es primavera.