viernes, 1 de agosto de 2008

Mensajes -Primera parte




"Cuantos mensajes; jamás olvidaré de nuevo el móvil en la oficina. Saliste muy de prisa, jódida tintorería que cierra temprano los sábados. A esta hora El Chino debe haber descargado ya la lista completa de tus contactos, leído todos tus SMS, llamado a tu madre para joderla diciéndole que tienes un hijo regado y enviado un mensaje forward a los panas diciendo que saliste del closet, te declaras gay y tu novio se llama Yolando. Conoces bien al muy hijo de puta, tal vez tu imaginación quedó corta. Igual es tu amigo, también te ha sacado la pata del barro" – Me decía aflojando la corbata a las 4:37 a.m. llegando a casa después de aquel pesado cocktail atestado de modelitos a la cacería de algún ingenuo que les financie la mentirita de sus lindos rostros. Negocios son negocios.

La contestadora: -“Usted tiene sesenta y nueve mensajes sin escuchar, cero mensajes guardados. Reproduciendo, primer mensaje…”

-11:23 a.m. mensaje #1: “Tengo tu celular de rehén y se como usarlo, no aceptamos recompensa. Te jodiste, El Chino”
-11:41 a.m. mensaje #2: “¿Hijo que pasó con tu móvil? Quiero hablar contigo seriamente, llama a tu madre”
-11:43 a.m. mensaje #3: “Señor tenemos un paquete a su nombre, la dirección no está muy clara y nos gustaría saber donde podemos entregarlo...”

Ya estaba empezando a aturdirme y quedaban sesenta y seis. Dejé los zapatos a la puerta de la cocina, caminando descalzo al refrigerador tomé del pico un primer sorbo de naranjada ácida sabor a cartón. Está mejor que el ponchecito…

-12:05 p.m. mensaje #4 “Le habla su secretaria, le he llamado a su móvil pero no he podido comunicarme, ya voy saliendo a mi casa. Ha recibido dos llamadas importantes: una de la oficina de encomiendas y otra de una mujer que le urgía mucho hablar con usted, su nombre era Iso…” se escuchaba a lo lejos.

…ya es domingo, trasnochado y sólo. Por fin en casa, donde no me espera sino la contestadora para culparme sesenta y nueve veces por haber olvidado mi celular. Como te quisiera aquí arrancando mi corbata con los dientes, desafiando a cada rincón vacío de esta casa con tu presencia…

-1:36 p.m. mensaje #5 “-silencio-”
-1:59 p.m. mensaje #6 “Mi pana te estamos esperando, mira que es la semifinal, ya llegamos 10, soooolo faltas tuuuu tu presencia y nada máaas…”

…iré a dormir, es suficiente con no tenerte para encima a esta hora extrañarte. No me aguanto escuchar todos los mensajes. Mañana será otro día.

2 comentarios:

Carlos Briceño dijo...

la segunda parte si se me hace un poco dificil.. jejeje paciencia

Andre@ dijo...

Está simpatica la narración!! Me ha gustado mucho!!
Espero la segunda parte!! :D